Islas Malvinas

Malvinas

¿Quién nos habla aquí de olvido,
de renuncia, de perdón?
¡Ningún suelo más querido, de la patria en la extensión!

Permítanme comenzar expresando lo que las Islas Malvinas significan para mí. Como muchos de ustedes saben, nací en 1982, el mismo año en que Argentina y el Reino Unido se enfrentaron en una guerra que nos dejó heridas profundas. Aunque yo era apenas un bebé en ese momento, la historia de esa guerra y la lucha por la soberanía nacional sobre las Malvinas siempre han estado presentes en mi vida, soy generación Malvinas.

Para mí, las Malvinas no son solo un territorio en disputa. Son una parte integral de nuestra identidad como argentinos y argentinas. Son el símbolo de una lucha por la libertad y la independencia que comenzó hace más de dos siglos y que aún continúa. Cada vez que veo la bandera argentina ondeando, siento una mezcla de orgullo y tristeza. Orgullo porque esa bandera representa todo lo que somos como país y como pueblo. Tristeza porque aún no hemos logrado recuperar lo que nos pertenece.

Pero también recuerdo con profunda emoción y gratitud a los soldados argentinos que lucharon y murieron en esa guerra. Hombres y mujeres que dejaron todo por la defensa de nuestra patria y por el sueño de ver las Malvinas argentinas. Es a ellos a quienes debemos honrar y recordar siempre. Su sacrificio no fue en vano, y su memoria debe inspirarnos para seguir luchando por nuestros derechos soberanos.

Como político y candidato a gobernador en la provincia de Santa Fe, creo que es mi deber recordarles a todos que las Malvinas son una causa que nos une como argentinos. No importa de qué provincia seamos, cuál sea nuestra religión o nuestra ideología política. Todos compartimos el mismo sentimiento de amor por nuestra patria y el deseo de justicia.

Por eso, les pido que me acompañen en esta lucha, cómo yo acompaño a cada veterano Que se sumen, quienes aún no lo han hecho, a levantar la voz para reclamar lo que es nuestro. Que no nos dejemos vencer por el desánimo de quienes pretenden entregarlas ni por el pesimismo de quienes las sienten una causa perdida. Que sigamos luchando por nuestros derechos soberanos y por la memoria de aquellos que dieron su vida por nuestra patria y por los héroes y heroínas que aún viven entre nosotros y nosotras.

Hoy más que nunca, en un mundo cada vez más globalizado y cambiante, es importante recordar nuestras raíces y nuestra identidad. Las Malvinas son una parte esencial de esa identidad. No podemos permitir que se nos arrebate lo que nos pertenece. No podemos permitir que se nos borre de la historia. Sigamos luchando juntos por las Malvinas argentinas.

Con Más Corazón lleno de esperanza y el compromiso firme de seguir luchando por nuestras causas justas, les envío un abrazo fraterno y les agradezco por estar siempre ahí.

Atentamente.
Marcos Cleri.


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